Aprender baloncesto debe ser visto como un desafío, no como una amenaza.
Sin duda el artículo de "Cómo ser Ricky Rubio" abrió la caja de pandora y estableció varios términos indispensables para "tratar" con los padres de familia a la hora de que un entrenador, un club o un colegio hace cuando integra al hijo de un padre frustrado de su etapa como jugador: Si no se atiende el problema de raíz -o desde antes, desde la semilla- la cosa no germinará en buenos términos, tarde o temprano los padres, el jugador, el coach y el club, dirán basta, y echarán por tierra lo que por derecho del niño debe ser: El Derecho a DIVERTIRSE mientras APRENDE un DEPORTE.
Juan Carlos Pidal, entrenador internacional de varias selecciones, comentaba que se deben establecer las reglas por escrito para el jugador y para los padres. Es más importante que los padres y el club estén en el mismo canal, pero siempre habrá padres que desearán que sus hijos SEAN más que los demás por alguna razón, las principales son éstas:
10 RAZONES MÁS COMUNES PORQUE LOS PADRES EXIGEN TRATO PREFERENCIAL PARA SU HIJO.
1. Mi hijo merece trato especial porque tiene "Talento".
2. Mi hijo merece trato especial porque es Alto.
3. Mi hijo merece trato especial porque YO fui un gran jugador y él, si lo desarrollan adecuadamente, lo será.
3. Mi hijo merece trato especial porque él desea ser mejor que los demás.
4. Mi hijo merece trato especial porque tiene MÁS tiempo entrenando que los demás chicos.
5. Mi hijo merece trato especial porque tiene MENOS tiempo entrenando que los demás chicos.
6. Mi hijo merece trato especial porque es de un ESTRATO SOCIAL más alto que los demás.
7. Mi hijo merece trato especial porque viaja desde más lejos para llegar.
8. Mi hijo merece trato especial porque HACEMOS un PAGO o DONACIÓN mayor a la mayoría.
9. Mi hijo merece trato especial porque él ha viajado a clínicas, cursos y campamentos al extranjero.
10. Mi hijo merece trato especial porque yo estuve en la generación campeona regional del 79.!
Más la que usted pueda agregar.
Cómo se puede apreciar, la falta de preparación acádemica o el no ser un profesional en formación deportiva, hace que de las diez razones arriba mencionadas, al menos nueve de ellas carecen de total sentido, una de ellas puede tener algo de razón, la 9. Si su hijo ha asistido a varios campamentos, clínicas y cursos, será evidente si tiene mejores capacidades técnicas de sus compañeros.
Pero antes de continuar, describamos ¿Qué es trato preferencial? ¿Es muy grave? ¿Qué tanto? Es mucho. Un padre descontento, es un padre que empezará a señalar culpables. Un padre quiere que su hijo sea el mejor YA. A él no le gusta que le digan de procesos, de tiempo, de desarrollo. Erróneamente quiere que su hijo juege muchos minutos en los juegos, anote muchos puntos, gane partidos, gane campeonatos y sea el Más Valioso del Partido Final. Incluso si un hijo llegara a lograr todo eso, su padre, ténganlo por seguro, exigiría más.
Pero como muy pocos chicos lograra eso, y habrá varios padres descontentos, buscarán culpar al entrenador, o al club. Algunos se retirarán junto con sus hijos e iniciarán un peregrinaje absurdo por varios clubes hasta que se rindan y estén completamente convencidos de que nadie pudo estar a la altura de el enorme "talento" de su hijo, el cuál, harto también, no querrá saber más de baloncesto por un tiempo. Y la historia se repetirá con el nieto, con el bisnieto, etc. Verán el televisor verán que juegue la Selección y como su hijo pudo haber llegado ahí de no ser por que todo mundo estuvo en su contra y los ineptos 11 entrenadores, 8 clubes, y el sistema deportivo nacional.
Y todo porque el coach no hizo su trabajo con los padres desde el día uno.
¿Qué es trato preferencial que un padre quiere para su hijo?
1. Que el entrenador reconozca que el "alumno" es un talento aventajado.
2. Que le ponga ESPECIAL atención a su hijo, incluso MÁS que a los demás chicos en los entrenamientos.
3. Que le de minutos (más) en los partidos.
4. Que su hijo sea titular.
5. Que su hijo haga muchos disparos, de preferencia más que los demás.
6. Que su hijo juegue los minutos finales de los partidos apretados.
7. Que su hijo NO juegue los minutos finales de los partidos perdidos por grandes desventajas.
8. Que su hijo reciba pantallas, bloqueos y pases de jugadores que ha vista del padre son menos aventajados que su hijo.
Más las que usted pueda agregar.
Lo más importante no es frustrar una "carrera" deportiva antes de empezar. El deporte en México esta lleno de malos procesos, un escaso y precario apoyo por parte de las autoridades, suelos ridículos para los formadores y pocos espacios de calidad donde practicarlo. Tener un lugar donde los niños pueden desarrollar el baloncesto ya es en sí una gran ventaja. Todos, entrenadores, autoridades y padres, debemos de guiar a los niños y jóvenes a la practica constante del deporte. Los padres que no tienen bien afianzado los valores deportivos y humanos, se los transmitirán a su vez a sus hijos, y ellos verán un mundo en sus ojos muy distintos a los de la realidad. No es que el jugador crea que puede inventar un nuevo mundo donde él deba dominar y destacar. No hay que ver el ambiente y la situación como una AMENAZA, sino como un DESAFÍO, siempre cambiar lo NEGATIVO en una situación POSITIVA.
“Las ideas permanecen aunque las personas no continúen
El Síndrome John Malcovich.
Más atinado no puede ser la alegoría de Gónzalo Gómez, cuando compara la película de John Malcovich con la intención de los padres sobre la vida de sus hijos, un acto egoísta de parte de los padres y peligroso en sí para los hijos, por la escasa libertad y albedrío del que disponen los vástagos:
John Malcovich realizo en 1999 "Como ser John Malcovich", un film surrealista con notable éxito en EEUU y que en su desarrollo (argumento) "hace que algunas personas se puedan meter en la mente del popularísimo actor para poder vivir y sentir como él"
El mensaje que nos comenta el entrenador español es que los padres suelen dar al traste con el futuro de su hijo. "Con la excusa de tener un diamante en bruto, acaba siendo un bruto que pudo ser un diamante"...
PADRE
No vea lo poco que va a jugar - Vea lo que va a jugar asi sea 20 segundos, 5 minutos o más.
No lo estanque en un club - Un semestre un lugar, una liga dominical, liga de verano, de dic, etc
Es innegable que Ricky Rubio es un excelente jugador, mucho más "extrarrestre" que el propio Pau Gasol, que debuto en Granada con 14 años de la mano de García Reneses y que sirve de ejemplo para muchos(a veces diría casi todos) los jugadores en formación, incidiendo demasiado en los jugadores cadetes y junior y por ende…en los "malditos" padres de edades demasiado tempranas y adolescentes desde los 14 a 18 años…
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Ricky Rubio, en su paso por el F.C. Barcelona
¿Cómo ser Ricky Rubio? Sencillo, nadie puede ser como otro en vida. Yo también quería ser como Drazen Petrovic, pero sabía que "AMADEUS" sólo había y habrá uno de por vida…le podía llegar a imitar en lances del juego, pero en un entrenamiento sabía que se me caía el pelo si lo intentaba hacer como el genio de Sibenik…
Los padres son aun peores que antes, peores porque en los momentos actuales ellos pagan la cuota del jugador, la ropa en muchos clubes/colegios y alguno hasta tiene el atrevimiento (presionan para ello) de ser un delegado de equipo en el equipo respectivo de su hijo. Cada vez es más difícil ser entrenador de un equipo de formación, pues los padres (y madres) están demasiado entrometidos en los equipos y lo que debería ser una preocupación por su hijo, se convierte en una guerra terrible por/para con el entrenador de turno.
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Rubio en el Joventut. Foto de Encancha.com
La experiencia me indica que tanto vídeo de Ricky Rubio cada semana en un diario español (con su respectivo vídeo) crea un retroceso descomunal en el aprendizaje de técnica individual y fundamentos que debía uno enseñar a los jugadores. A pesar de que pudieras, incluso, realizar los gestos para poder desarrollar ejercicios, los jugadores lo que hacían era trasladar lo que veían por la televisión o internet al entrenamiento. Más de una vez les decías aquello de "deja de ver la tele", pero costaba mucho sacarles del vicio de imitar o querer ser como Ricky Rubio (Michael Jordan sigue estando muy presente en la mente de todos también)…
Luego, los fines de semana, llegaba el cisma de los padres. Todos tienen un "Ricky Rubio" en su casa, y por ello, mis jugadores tenían que salir a jugar con exagerada celeridad. Conseguí sacar, más de una vez, a toda una plantilla en los dos primeros cuartos (cadetes), pero eso no era suficiente. Siempre tenías al padre/madre quejoso porque su hijo "no jugaba", y bueno, lo aceptas y lo hablas las veces que haga falta…pero ya era enfermizo que te llegara la madre del que más jugaba y te decía eso de "mi hijo juega mucho y termina muy cansado, y luego no estudia…" Entonces ya te quieres "morir" y piensas que eres un gilipollas, la dices a la madre que "¿Cuánto quiere Vd. que juegue?". La vida de entrenador de formación es una coña total y da igual dónde estás, para el objetivo de cada uno, nunca das con la tecla necesaria…
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Con la selección española de su edad
Creo que la vida del jugador es ahora más corta que antes. Los chavales se queman muy pronto por sus padres y su situación es realmente estresante y, además, les cuesta mucho (normal) no salir del paradigma de que "el que me perjudica es el entrenador porque lo dice mi papá y mamá". Cada vez son más niños "los niños" y no alcanzan ninguna madurez cuando pasan de categoría junior. He podido entrenar a todas las categorías desde Pre-Benjamin a Senior y el retroceso es muy grande con respecto a tiempos pasados. Cada vez, los padres, están menos con los hijos (en muchos casos trabajan los dos padres y ven menos que tú a sus hijos)…y yo ya lo llamo "Celopatía" al comportamiento de alguno de los mentores, pues, llega un momento en que no se fijan para nada en lo que estás haciendo por ellos (es cierto que cada vez se sabe menos del deporte en sí y en eso tiene mucha culpa las reglas tan cambiantes del juego F.I.B.A. y que tan LOCOS vuelven a los padres y no padres de los chavales) y alguno parece que es tu rival en la educación del jugador y si les enseñas tal o cual valor, el padre/madre de turno te lo puede llegar a cambiar por completo, sólo porque para ellos eres un ser insignificante y pasajero en la vida de sus hijos…
Ricky es muy bueno, pero tal vez siempre vendieron su imagen demasiado hacia los demás y no es un buen ejemplo ni ayuda para nadie. Es curioso que Calderón (algunas camisetas de Toronto se siguen viendo, la de los Pistons es muy cara, normal) no haya creado tanto furor, tal vez porque su llegada arriba fue más gradual y no acaba de ser tan mediático como Rubio. Está muy claro, si Ricky pudo jugar con 14 años en la A.C.B., todos podrían hacerlo o , por lo menos, a cada hijo se le presupone una calidad antes de entrenar que tienes que asumir cuando, precisamente, ninguno puede , ni siquiera llegar a categorías decentes una vez acabado su periplo de junior(juvenil de antes…). Pero bueno, en la adolescencia tienes que aguantar todo este problema social siendo un tonto absoluto al frente de un equipo al cual lo puedes considerar un mini-club pues de 12 personas que puedes tener en plantilla, las tienes que multiplicar por tres y, al final, tienes la sensación de tener 36 "jugadores", con lo cual tienes ese mini-club del que hablo…
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Penetración de Ricky hacia canasta
Entrenar formación es muy duro. O te conviertes en un comparsa, colega de los padres y funcionas con el "ja, ja, ja" toda la temporada o pasas a ser un entrenador que no entra por el aro de nadie y por ello te harán la vida imposible…
Ya lo decía un amigo/compañero mío: "Cuanto más les das, ellos menos te dan" "A veces es mejor…dejarlo estar"…Pero bueno, eso es ir en contra de uno mismo. Pocos ya quieren entrenar por poco dinero y muchos problemas. Creo que tenemos que dejar paso a la figura del padre/entrenador y pasarnos todos al tenis…y al fin y al cabo…es a lo que juegan muchos en un deporte de ¿equipo?...no, para cada padre su hijo es tan bueno como…Rubio o Nadal, los demás, están de más.
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